Movilizaciones de los campesinos
Los
manifestantes visitaron el parque principal de la localidad de Bosa, donde
socializaron los motivos que los llevan a realizar las Jornadas de la
Indignación en varios puntos del país: Bogotá, Sur occidente, Bajo Cauca
antioqueño, Chocó, Sur de Bolívar y Arauca.
Lo
nocivo del PND
En
palabras del ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas, para cumplir las metas del
actual PND el Gobierno tendrá que "apretarse el cinturón y hacer una
reducción de los gastos de funcionamiento que pasan de 121,1 billones de pesos
a 119,4”. Esta reducción afectará gravemente al campo colombiano.
Uno
de los puntos del Plan alude a la “transformación del campo”. Para tal fin, se
asignan 49,3 billones de pesos de los cuales se espera que los privados
inviertan 35,5 billones y el sector público, 13,7 billones.
Con
claridad, el modelo de Santos frente al agro colombiano consiste en privilegiar
que las empresas privadas hagan su agosto mientras el Estado se desentiende
cada día más de sus obligaciones. Además de esta definición, los ambiciosos
proyectos de infraestructura de la prosperidad de Santos parecen estar cada vez
más en vilo gracias a la des-aceleración en el ya imitado crecimiento económico
del país, según anunció el mismo Gobierno la semana pasada.
Incumplir
acuerdos, constante de Santos
Por
otro lado, los voceros de la Cumbre aseguran estar cansados de las dilaciones
del Gobierno en las exigencias y los diálogos. Desde la instalación de la Mesa
Única de Negociación entre campesinos, indígenas y afros con el Gobierno,
realizada en octubre de 2014, no se presentan avances significativos en la
agenda.
A
pesar de las declaraciones presentadas por Santos en ese momento, en las que
recordó su “origen campesino” y “compromiso decidido” con el campo colombiano,
hoy en día los puntos neurálgicos de las negociaciones no han sido tratados. Si
este hecho se suma a los contradictorios planteamientos del PND, el futuro de
la Mesa en términos de presupuesto parece estar complicado.
No
obstante, esta no es la primera oportunidad en que el Gobierno deja a los
campesinos “vestidos y alborotados”. En el 2006, la Minga Indígena denunció en
su plataforma de lucha una serie de engaños y promesas incumplidas como
motivación prioritaria para tomarse las carreteras. Casi 10 años después la
situación ha cambiado poco y parece empeorar con el pasar de los días. Las
razones para protestar, evidentemente, sobran.
Sin
garantías para movilizarse
El
primer informe de las organizaciones defensoras de derechos humanos que
integran la Cumbre Agraria asegura que las intimidaciones no se han hecho
esperar. Policías han llegado al lugar donde se concentran los movilizados, el
Coliseo El Campin, con la intención de vigilar e identificar al grupo. “Al ser
requeridos por los defensores de derechos humanos, los agentes manifestaron que
pertenecían al cuadrante 24 que era el de la zona. Y el agente que había tomado
las fotografías manifestó que “él tenía derecho y que podían llamar a quien
quisieran”, asegura el informe de la situación. Este episodio se repitió en
varias ocasiones a lo largo de la tarde del domingo.•Paralelamente,
una delegación de 37 campesinos provenientes de la región del Catatumbo, zona
nororiental del país, fue detenida por policías motorizados que requisaron
excesivamente a los sujetos, todos ellos integrantes de la Asociación Campesina
del Catatumbo -Ascamcat-,
organización que lideró las movilizaciones agrarias de 2013.
Extraido de: CENSAT
Agua Viva - Amigos de la Tierra Colombia- 2019Inició
movilización de campesinos, indígenas y afros en Bogotá.
https://censat.org/es/noticias/inicio-movilizacion-de-campesinos-indigenas-y-afros-en-bogota
Comentarios
Publicar un comentario